Escucho cómo agoniza mi corazón
y lo siento secarse como una negra pasa
y su dolor, al verlo, se vuelve dolor mío
un dolor que me he permitido vivirlo
Ahora mírame aquí sentada
viendo cómo el tiempo nos consume
y te miro y vos no hacés nada
y me miro y yo no hago nada
Respiro, respiro y no me alivio
porque cuando respiro, lloro
y el silencio zumba en mi cabeza perturbada
haciendo pedazos
el pedazo de alma que me quedaba.
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